Un nuevo estudio de un grupo de investigadores de la Universidad de Sorbona promete arrojar luz sobre el fenómeno de los videos virales.
Estos investigadores descubrieron que, las elevadas tasas de difusión están estrechamente vinculadas a la generación de las emociones conocidas como “positivas”. Es decir, cuando un contenido nos produce alegría, empatía, admiración o cierto cariño, lo compartimos. Esta sensación común en cientos de miles de personas hace que las cifras se eleven hasta alcanzar la “calificación” de contenido viral.
Si bien estos generan habitualmente emociones positivas como la alegría o el miedo, la emoción negativa dominante que puede influir en la alta difusión de estos materiales, es justamente la sensación de sentirse diferente. Aparentemente, la comparación entre lo que hacen quienes protagonizan esos vídeos y lo que el usuario que los difunde haría, motiva a muchos usuarios a compartir este tipo de contenidos.
Dicha investigación se apoya en conceptos de Psicología, que estudian el efecto de las emociones en el comportamiento de los individuos. De acuerdo a estos investigadores, es esta compleja red de emociones provocadas lo que hace que situaciones de lo más ordinarias se vuelvan tan trascendentes.
Kevin Allocca es el Trends Manager de Youtube y en esta charla de TED explica los 3 principales motivos por los que un vídeo se hace viral.
Ahora los vídeos permiten casi a cualquiera hacerse famoso pero de las 48 horas de vídeo que se suben a Youtube cada minuto, un porcentaje muy pequeño consigue viralizarse. Según Allocca, experto en el tema, las claves son los siguientes:
* Taste makers: personas que se dedican a compartir contenidos y que hacen que se difunda con facilidad.
*Comunidades de participación: grupos que hablan del vídeo en redes sociales y se hacen partícipes. Ten en cuenta que es la audiencia la que define la popularidad de un vídeo.
* Factor sorpresa: es importante que sea algo diferente y que tenga un toque de humor.
¿Cómo puede ayudar esto a las empresas?
La empresa Unruly ha elaborado un extenso documento en el que examina varios elementos interesantes sobre la compartición de videos corporativos, incluido el mejor día para lanzar una campaña y los factores creativos que más pueden contribuir a que un vídeo se convierta en viral. Según el documento titulado “The Science of Sharing”, los datos son importantes pues los investigadores creen que existe la posibilidad de predecir y repetir el éxito.
Se analizaron la compartición de los 1000 vídeo más compartidos durante las 52 semanas.
Los datos muestran que la actividad de compartir era más alta los viernes (15.9% por encima del promedio), los miércoles (14.1%) y los jueves (7.5%). Los fines de semana eran menos activos, cayendo los sábados un 15.2% por debajo del promedio y los domingos un 25.8%.
Si bien se entiende que los viernes son el día óptimo, no es este el caso. Un análisis día a día nos muestra que el punto álgido de la campaña ocurre en el segundo día con un 10% del total de comparticiones, En concreto, el 25% del total de comparticiones ocurre en los 3 primero días.
Así, el mejor día para el lanzamiento tiene lugar el miércoles seguido del martes y del lunes.
La creatividad adecuada.
Es importante señalar que la respuesta emocional necesita ser bastante intensa para que el vídeo sea exitoso. Muchos de los videos analizados prueban el humor, pero sólo unos pocos son vistos como hilarantes, hundiendo las posibilidades de ser virales en un alto grado.
Conclusión:
Las empresas tienen oportunidad de conseguir vídeos virales replicando los elementos de las campañas más exitosas:
*Diferenciándose utilizando elementos emocionales distintos del humor o consiguiendo algo increíblemente divertido.
* Provocando una fuerte respuesta emocional y dando a los espectadores múltiples razones para compartir.
*Seleccionando el día más adecuando para la distribución, preferiblemente el miércoles o antes.